Con motivo del Día Mundial del Medio Ambiente, que se celebra cada año el 5 de junio, se multiplican las iniciativas para concienciar a la población sobre la crisis climática provocada por el impacto ambiental del hombre.
Unapol, Unión Nacional de Asociaciones de Productores de Aceituna, a través de momentos de encuentro, apoya a los empresarios olivareros en los procesos de modernización de las plantas, invitando a la adopción de soluciones que combinen la eficiencia productiva con un menor impacto ambiental.
"Actualmente", explica. el presidente de Unapol Tommaso Loiodice (en la imagen) – Europa ha puesto a disposición recursos y fondos para favorecer una transición ecológica cada vez más necesaria. Nuestra tarea es, por tanto, acompañar a los olivareros en este proceso de evolución. Tenemos el deber de proteger la biodiversidad, de apoyar al mundo agrícola en esta fase crucial”.
Una empresa olivarera virtuosa, recuerda Unapol, es aquella que se destaca no por la cantidad, sino por la calidad. Y calidad es sinónimo de respeto por la naturaleza y los consumidores. «Estamos en medio de una fase de transición ecológica –destaca Loiodice–, hemos superado el llamado 'punto de no retorno'; por nuestra parte, existe el mayor esfuerzo para frenar el riesgo de degradación del suelo y establecer las condiciones para la conservación y puesta en valor del patrimonio olivarero existente. Las generaciones futuras tienen derecho a poder disfrutar de la Tierra como la tuvieron quienes les precedieron. Todos tenemos que hacer nuestra parte; lo intentamos con acciones concretas, con la sensibilización y con la educación para el consumo consciente».
Por último, pero no menos importante, por lo tanto, el tema de la educación en nutrición y la compra consciente. «En el proceso de transformarse en una empresa más atenta a las cuestiones ambientales -explica el presidente de Unapol- se confía un papel muy importante al consumidor. A través de sus elecciones, es capaz de influir en el mercado y orientar la producción hacia modelos sostenibles. Como solemos decir, un consumidor no compra, sino que invierte en sí mismo, en su propia salud y en la protección de un territorio. Por eso nos comprometemos a asegurar la máxima transparencia en la historia de un producto, para garantizar un comportamiento de compra que refleje siempre una elección informada y encaminada a proteger nuestro planeta”
