Entre los muchos temas críticos que se persiguen estos días entre los costos de la energía, el combustible y los fertilizantes, también hay lugar para algunas buenas noticias.
De hecho, desde 2019 hasta hoy, el consumo de aceite de oliva en el mundo ha crecido más que la producción. Incluso en la campaña actual, las previsiones indican que el consumo que estará alrededor 3,2 millones de toneladas. Para dar noticias de la tendencia, comentando que "es la primera vez que pasa esto en tres años consecutivos" ocurriendo "entre los dos años de la pandemia", es el Consejo Oleícola Internacional (COI).
Según las previsiones del mismo Coi, la producción mundial de aceite de oliva para la presente campaña se asentará en 3,1 millones de toneladas, un ligero descenso respecto a las dos campañas anteriores. “El aumento del consumo – comentó el director ejecutivo del Coi Abdellatif Ghedira (en la imagen) - es positivo. Muestra cómo el consumo refleja cambios en los estilos de vida de los consumidores. Por supuesto, el covid-19 ha cambiado nuestro comportamiento, pero los consumidores han dirigido sus compras hacia productos de mayor calidad, lo que también ha producido un aumento del valor de los intercambios a escala global”.
